A las 5 h. teníamos que estar listos para salir, era la etapa más larga del trayecto, 560 Kms., y además de regreso, yo no pude desayunar, me levanté con el tiempo justísimo.
Mi estomago se estaba rebelando.
En una gasolinera mi estomago no pudo más y reventó, con las consequencias que eso reporta, a cambiarme tocaban, y ahí me teneis en pelota picada detrás de la camioneta para poder quitarme la ropa delatora, y ponerme otra limpia, creo que May inmortalizó el momento con su cámara.
Durante el camino mi estado paso de lamentable a desechable, al parar para comer en ???, no pude acompañar al grupo, preferí mantenerme apartado, no por la peste, sino porque me dolía todo y en especial la cabeza, en la soledad de mi rincón, solté lo poco que quedaba en mi estómago vacio, con el consiguiente debilitamiento, dejé al grupo y me dirigí al hotel ZAKI en la ciudad de Meknés.
Sé que mis compañeros estuvieron de visita en su Zoco, sé que vinieron a molestarme para preocuparse por mi situación, pero coño que vengan todos juntos, no uno cada diez minutos.
Total que estuve en cama desde las 15h. hasta las 6h. del día siguiente.
3 comentarios:
weno weno weno, vaya + q un viaje motero m parece un viaje d borraxos!!!
Cuidadín q el alcohol y la moto no van muy d acuerdo y mírate el carnet, así verás tu fexa d nacimiento.
Nosotros este finde hemos exo 547Km para hacer las fotos a los carteles.
Veo que el alcohol también ha hecho mella en tu vista para encontrar las letras adecuadas... juraría que es Erfoud... pero me puedo equivocar...
Ostias nene, como van las indirectas. Bueno tu pasatelo bien, que al final las resacas se recuerdan, las ciudades no
je je je.
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